Si el arte sirve más allá que para decorar paredes, que sirva la obra de Lorenzo Quinn expuesta en Venecia para hacer una grito de socorro por salvar nuestro planeta. Las manos de su hijo proyectadas en enormes esculturas de poliuretano sujetando un antiguo palacio veneciano representan la esperanza en la generación que nos sucede por su capacidad de salvar la Tierra, de detener la subida de los mares que acabará por hundir Venecia, y como éste todos los daños que hemos provocado.
El arte es una forma de comunicación, la oportunidad de expresar. Nada mejor que concienciar al mundo a través de esta obra expuesta en el Gran Canal (Venecia, 2017) sobre la amenaza a la que estamos expuestos!
Coincidir con La Biennale es completamente inspirador. Los días no solo implican recorrer sus calles abrumado por la arquitectura y sus suntuosos palacios, si no compartir todas las exposiciones itinerantes de arte expuestas en cada esquina, en el interior de edificios antiguos, de claustros, de museos, incluso al aire libre. La creatividad y la forma de entender la vida de cada uno de sus artistas a través de sus obras abren una ventana al espectador de inspiración, de interpretación de la realidad, de deseo, de querer integrar más las artes. Las obras de Damien Hirst y Jan Fabre están entre las más visitadas, impactantes por sus dimensiones y meticuloso trabajo. Mientras, la exposición permanente en el museo Peggy Guggenheim asombra por la categoría de sus obras.
Hacer el ejercicio por un instante de imaginar cómo transcurría la vida en la época de los mercaderes es algo que ha hecho todo el mundo. Este punto estratégico en la ruta de las especies tuvo su esplendor durante un periodo en la historia y su opulencia seguirá por mucho tiempo responsable de tal multitud de miradas atónitas, fascinadas por el lujo y la exuberancia de esta ciudad.
Sin embargo, el contraste con el recién inaugurado Fondaco Dei Tedeschi y su edificio rehabilitado es también interesante; rompedor por su arquitectura y la selección de tiendas distribuidas en sus cuatro plantas. Mientras, arriba de todo desde la azotea aguardan preciosas vistas sobre la ciudad, el Gran Canal y los principales edificios de la ciudad.
Cerca, al otro lado del puente de Rialto bajo las antiguas arcadas se venden los Friulane, los antiguos zapatos que utilizaban los campesinos del nord-este de Italia hechos a mano, que se han mantenido tras generaciones y que hoy Pied à Terre los vende manteniendo su historia y su tradición en los colores más bonitos de suaves terciopelos. Difícil escoger.
Antonia Sauter es la diseñadora por excelencia responsable de crear las máscaras y vestidos de época más espectaculares para el Carnaval de Venecia, eventos oficiales, fiestas o celebraciones privadas. Fue estilista también para Eyes Wide Shut de Stanley Kubrick y le fueron encargadas piezas únicas para la película. Vale la pena visitar su atelier.
Hay infinidad de lugares bonitos en esta ciudad. Lo mejor es divagar y perderse entre sus calles, activar la creatividad para imaginar cómo debía ser todo ésto en el Renacimiento y esperar el atardecer para seguir disfrutando de una Venecia vacía de turistas que regresaron a sus hoteles fuera de la isla, y que regalaron el placer de pasear sin masas.
Hora de comer!
–Trattoria Antiche Carampane. Rio Terà de le Carampane, 1911
–Osteria Da Fiore. San Polo, 2202
–Osteria Santa Marina. Campo Santa Marina, 5911
–Do Forni. Sestiere S. Marco 457
–Ristorante Quadri. Piazza San Marco, 121
–The restaurant o The garden en Aman resort. Calle Tiepolo Baiamonte, 1364, Palazzo Papadopoli, 30125 Sestiere San Polo
–Ristorante Glam. Palazzo Venart, S. Croce 1961
-tengerenge
2 Comment on “Preciosa Venecia! Inspiradora Biennale!”
Ana Patricia Clua
junio 26, 2017 a las 7:02 am
Que fotos mas bonitas!! Me encanta la escultura, la dejaran para siempre??
Que gusto de blog, gracias Sonia
Son
junio 26, 2017 a las 1:30 pm
Se quedará hasta que acabe la Biennale, que finaliza el 26 de noviembre 2017. Al parecer podría pasar a ubicarse en algún lugar estratégico del planeta representando la amenaza del cambio climático. Se ha barajado apoyar la escultura en un iceberg del Ártico y esperar un tiempo hasta que por motivo del desvanecimiento del hielo queden las enormes manos separadas del iceberg y ello sea una muestra matemática que evidencie los hechos.